Actividades para disfrutar en familia mientras superas la Discalculia
Los padres tienen un rol importante en el tratamiento de la discalculia. A continuación podrás conocer algunas actividades familiares que te ayudarán a compartir más tiempo con tu hijo y hacerlo sentir importante.
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Cocinar juntos
Revisar con
el pequeño la receta que vas a preparar y pedirle que se encargue de preparar
los ingredientes necesarios para cocinarla. Por ejemplo, necesitamos 1/5 kg de
lentejas, 3 zanahorias, 2 cebollas, 6 rodajas de chorizos, etc.
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Jugar con el reloj
Pedir al niño que se encargue de
avisarte a una determinada hora, celebrar juntos lo bien que lo ha hecho y lo
responsable y “mayor” que es.
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Ir al supermercado
Que te ayude a hacer la compra, que sea
responsable de identificar el número de cosas que tienes que comprar,
identificar los productos, cantidades y
que las introduzca él mismo en el carrito.
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Jugar a adivinar montones
Se hacen montoncitos de piedras,
legumbres, o monedas y tienes que jugar a acertar en qué montón habrá más o
menos. Las cuentan juntos, y quien diga
el número más aproximado gana.
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Jugar a contar
Contar, por ejemplo, todos los coches
rojos que ves, contar a las personas que tengan zapatillas blancas, contar las escaleras que suben, etc.
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Encontrar números
Proponle que encuentre, por ejemplo, el
número “7” y lo buscas entre los números de las calles, en las placas de los
autos, etc.
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Jugar a recordar teléfonos
Llamar a la abuela, pídele que se
acuerde de las tres primeras cifras y tú te encargas de recordar el resto.
Llaman juntos, y si lo ha hecho bien lo celebran.
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Que te ayude a repartir cantidades
Si en casa somos 4, ¿cómo podemos
repartir un trozo de pastel en partes iguales?
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Jugar a poner la mesa
Repartir los platos, cubiertos, vasos,
servilletas y pan. Que entienda que es importante que a cada uno le corresponda
un set completo.
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Jugar con CogniFit
Es una estrategia fantástica para
estimular sus módulos cerebrales deficitarios, sin que los pequeños se den cuenta.
¡Mientras se divierten jugando!
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Jugar a las tiendas
Imagina que el niño es el bodeguero de una tienda, que elija de entre todos los
productos que tienen en casa las cosas que él va a vender en “su tienda” que
asigne a cada una un precio y le pone una etiqueta. Luego, tú te haces pasar por cliente. Con este
juego, repasará cantidades, realizando sumas, restas, incluso manejar dinero y
dar vuelto. Es una fórmula muy divertida para pasar momentos geniales en
familia y aprender jugando.
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